Mensaje de la Alcalde de Madison Satya Rhodes-Conway
El incendio del día de ayer en el lado oeste de nuestra Ciudad nos sirve de crudo recordatorio de que nuestros equipos de socorro continúan colocándose a sí mismos en peligro para poder mantenernos seguros durante esta pandemia. Mientras muchos de nosotros nos podemos dar el lujo de mantenernos sanos permaneciendo en casa, practicando el distanciamiento social y usando tapabocas y otras medidas de protección, aquellos que han escogido como profesión el servicio público, usualmente no se pueden dar los mismos lujos.
Mantener la distancia física para protegerse a sí mismos no es una opción para nuestros trabajadores de primera línea ya sea que estén combatiendo incendios, respondiendo a crímenes y disturbios, proporcionando servicios médicos y apoyando a aquellos que más lo necesitan, limpiando nuestros edificios o conduciendo autobuses. En estos momentos de crisis, ellos hacen lo que se necesita hacer para servir a los otros, usualmente poniéndose ellos mismo en riesgo durante el proceso. Como alcaldesa, me siento honrada y agradecida por toda su dedicación.
Pero nuestros trabajadores de primera línea se merecen más que nuestra gratitud, ellos se merecen saber que si caen enfermos como resultado de su servicio, los apoyaremos. Hasta la semana pasada, había unas normativas pasando por la legislatura Estatal que hubiesen ofrecido protección adicional a los equipos de socorro que se pensara que habían contraído una enfermedad contagiosa durante el curso de sus funciones. La semana pasada, se introdujo una enmienda que trasladaría la carga a los empleados infectados al tener que ellos comprobar que contrajeron la enfermedad durante el curso de sus funciones de trabajo.
En el caso de la pandemia de COVID, donde los individuos infectados son contagiosos antes que muestren ningún síntoma físico, seria virtualmente imposible para nuestros empleados probar en qué momento exacto estuvieron expuestos.
Nuestros trabajadores de primera línea merecen mucho más que esto. Ello se merecen la tranquilidad de saber que, mientras están poniendo sus vidas en riesgo para protegernos a nosotros, nosotros estamos listos para apoyarlos a ellos y a sus seres queridos en caso de que necesiten nuestro apoyo.
Hago un llamado a la compasión y a la razón de todos los legisladores estatales para que apoyen el proyecto de ley original, y que se opongan a la enmienda que amenaza con dejar a nuestros empleados sin la posibilidad de recibir Indemnización Laboral cuando más la necesitan.